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RESEÑA HISTÓRICA:


 

El Centro Provincial de Enseñanza Media N° 27 “Estudiantes Neuquinos” se creó según Decreto N° 0554 del 22 de marzo de 1983, a fin de poder absorber a un “considerable número de adolescentes con problemas para ingresar o continuar estudios de nivel medio”, ante la imposibilidad de incorporarse al C.P.E.M. N° 8 por falta de espacio físico. Las actividades se iniciaron el 14 de marzo de ese año, con tres cursos: Primer Año “A” (veinticuatro alumnos), Primer Año “B” (veinticuatro alumnos) y Segundo Año “U” (treinta alumnos). Funcionó en horario vespertino, en el edificio de la Escuela Primaria N° 92 “Pedro Palacios (Almafuerte)”.

El primer director de la institución fue el Lic. Benito Rodríguez Rodríguez con el secretario, el Sr. Héctor Julio Aragón. Las primeras preceptoras fueron Norma Ester Moretti de Rodríguez y Elsa Magdalena Flade de Sabathier. El plantel docente se integró con los siguientes docentes:

  •        Educación Física: Silvia del Valle Baretto

  •        Educación Física: Francisco Sandalio Núñez

  •        Matemática: Josefina López

  •        Ciencias Biológicas y Ciencias Físico-Química: Elba Rodríguez de Touceda

  •        Formación Moral y Cívica: Fernando Abel Trebino

  •        Lengua: Álida Inés Candiani y Lilian López.

  •        Inglés: Liliana Capelli.

  •        Geografía: Mónica Luaces de Ferreyra

  •        Contabilidad: Mirta Virginia Pérez de Trebino

  •        Educación Musical – Cultura Musical y Contabilidad: Olga de Zabaleta de Nappi.

  •        Educación Práctica: Oreste Yocca.

  •        Auxiliar de Servicio - Teodolinda Betancurt de Cir.

Al año siguiente el C.P.E.M. 27 se trasladó a la Escuela Provincial N° 240, en el Barrio CNEA y comenzó a funcionar en el turno tarde. Se incorporó un tercer año con la modalidad comercial. El 20 de junio de 1984 se recepcionó la Bandera Nacional de Ceremonias. El 25 de octubre de ese año el Lic. Rodríguez Rodríguez solicitó licencia y fue reemplazado por la Profesora Virginia Pérez de Trebino.

En este momento el problema más grave que enfrentó el CPEM fue la falta de un edificio propio. A principios de 1986 llegó a estar en duda la continuidad de su funcionamiento ante la falta de un espacio físico. Fue necesario conseguir un lugar para instalarla provisoriamente. Afortunadamente, después de las gestiones realizadas, se obtuvo la autorización para ocupar el playón existente en la Escuela N° 92. El Sr. Forma, vecino que no tenía familiares en la escuela, trabajó desinteresadamente. Gestionó ante una empresa de la obra de Alicurá y consiguió tres casillas que debían instalarse en el lugar antes mencionado. En este camino de lucha de los padres por asegurar un espacio para sus hijos, sucedió un hecho gracioso e insólito: “desde Neuquén eran trasladadas por la ruta 22, con otro destino, tres casillas. El Sr. Basaldúa ve venir las casillas y cree que eran las destinadas al C.P.E.M. N° 27. Así  las desvía para el terreno antes mencionado y se las instala. Después de una par de días llegan las otras tres casillas que eran las verdaderamente donadas. El municipio, ante la insistencia de los padres, donó una séptima casilla. Se ubican las siete en forma de U, con los extremos orientados hacia el Este”. En ese lugar, el 15 de noviembre de 1986, la institución despidió a sus primeros egresados, a saber: Antonia Barros, Patricia Cabezas, Mirta Casas, Laura Córdova, Norma Muñoz, Cristina Obreque, Patricia Real Silva, Gabriela Rivarola, Amílcar Rojas y Claudia Ruiz.

Allí funcionó hasta que se produjo el traslado a las nuevas instalaciones el 1° de junio de 1987, que se inauguraron oficialmente el 19 de junio de ese año. El edificio se construyó  en uno de los terrenos, parte de la chacra de la familia Tagliaferri, adquiridos por el Consejo Provincial de Educación. Las nuevas instalaciones escolares contaron con ocho aulas, baños para mujeres y varones, una cocina pequeña, dependencias administrativas y un baño para los docentes; pero, además: galerías sin cerrar, con sólo columnas, techo y piso; SUM en las mismas condiciones; sin timbre ni alambre perimetral. Pero, al fin la comunidad educativa del CPEM 27 cumplió su sueño: tuvo edificio propio, con algunos problemas: la imposibilidad de mantener los ambientes calefaccionados por el frío de las galerías, la humedad en paredes y pisos,  filtraciones en los techos y frecuentes fallas en la iluminación por cortocircuitos. Pese a todo, la matrícula creció y la institución continuó avanzando.

En noviembre de 1988 se iniciaron los trabajos para la terminación del edificio escolar, que se extendieron hasta marzo del año siguiente. Se realizó el cerramiento del Sum y los pasillos, como asimismo el cielorraso en todas las aulas y la oficina para la Asesoría Pedagógica.

Un hito importante en la historia de la institución fue el Proyecto “Pequeños Emprendedores”, que se inició a mediados del año 2000 como un intento de mejorar las estrategias metodológicas utilizadas y, de esa forma, favorecer la retención de los alumnos. La Prof. Dalia Iñiguez quien, en su carácter de Jefa del Departamento de Ciencias Jurídico-Contable, jugó un papel fundamental en el origen y desarrollo de esta propuesta de trabajo, nos contó su historia, de la que transcribimos algunos fragmentos: “Nace bajo la forma de aula taller acompañada de un gabinete contable cuyas actividades se muestran en el SUM a fines del 2000. Consistió en exponer el funcionamiento de diferentes negocios comerciales y de instituciones como Municipalidad, AFIP, Banco, Rentas, Bromatología, etc… La actividad tuvo lugar en cada turno e intervinieron todos los cursos. Fue el primer paso…”.

“Al año siguiente se decide trabajar exclusivamente con los Quintos Años como expositores de toda la tarea contable realizada en el año. También se hace en cada turno el resto de los cursos son los que activan el circuito económico realizando compras, ventas, depósitos, etc.”. A partir de entonces comenzaron a realizarse salidas educativas a chacras en producción, comercios minoristas y mayorista, cooperativas, asociaciones; como asimismo a la Municipalidad, Rentas, etc.

Esta propuesta fue creciendo con el paso del tiempo. Se tomó contacto con el IADEP y se comenzó a gestar la idea de organizar un concurso interno en el CPEM, con la participación de todos los proyectos presentados por los alumnos de los dos Quintos Años. El premio –una suma de dinero destinada a realizar un viaje a algún lugar de la provincia- fue otorgado al Proyecto “Lombritier”, elaborado por un grupo de alumnos de Quinto Año “A”, que en la oportunidad viajaron a Aluminé.

Luego surgieron las muestras de todo lo trabajado durante el año lectivo en noviembre, con un cambio de actividades, en una Jornada con la participación de toda la comunidad educativa. En el año 2004 se presentó en la Cuarta Convocatoria del Premio Estímulo organizado por la provincia, obteniendo en la oportunidad el Segundo Premio.

Este proyecto perduró hasta el año 2015...

Cuando la institución estuvo próxima a sus Bodas de Plata, la Comisión Pro Festejos organizó un concurso abierto a toda la comunidad. Se presentaron varias propuestas que fueron sometidas a una votación abierta a alumnos, padres, docentes, ex alumnos y ex personal de la escuela. Resultó elegida el nombre presentado por la preceptora Prof. Silvia Vidal. Por Resolución N° 0234 del 13 de marzo del 2009, el CPEM. N° 27 fue designado con el nombre de “Estudiantes Neuquinos”.